¿Por qué ocurre la tendinitis calcificante del supraespinoso?

La tendinitis calcificante del manguito de los rotadores es una condición causada por la presencia de depósitos de calcio en cualquier tendón del manguito rotador o en la bursa subacromio-sub-deltoidea.

Esta patología tiene una incidencia de entre el 2.5-7.5% en pacientes sanos sin patología previa de hombro, siendo más común en mujeres (70%) con edades de entre 40 o 59 años y sin estar relacionado con la activad física. Entorno al 10-20% de los pacientes, los depósitos de calcio son bilaterales.

Dentro del manguito rotador, es más fácil encontrar estos depósitos de calcio en el tendón del supraespinoso (80%), seguido por la parte inferior del infraespinoso (15%) y finalmente el tendón del subescapular (5%)

En el 20% de los casos estos depósitos de calcio son asintomáticos generando muy poco dolor y poca restricción de la movilidad del hombro.

¿Por qué aparecen los depósitos de calcio en el tendón?

Actualmente el mecanismo por lo que esto ocurre no está del todo claro. Se piensa que está relacionado con un problema de los mediadores celulares que inducen a una transformación de los tenocitos en condrocitos, lo cual, induce a la calcificación dentro del tendón. Ciertas teorías sugieren que el problema puede residir en una mala diferenciación de las células madre tendinosas  que erróneamente se convierten en células óseas.

Podemos dividir la tendinitis calcificante en 3 fases:

Fase postcalcifante: Esta fase puede durar varios meses. Tras intentar absorber los depósitos de calcio el tendón entra en una fase denominada proliferación-maduración, durante esa fase se generan nuevas células que tienen que adaptarse a las fuerzas mecánicas a las que se va a ver sometido el tendón. Finalmente las calcificaciones acaban siendo sustituidas por estos fibroblastos llevando a la curación del tendón implicado.

Fase precalcificante: En esta fase ciertas células tendinosas se convierten en tejido fibrocartilaginoso que favorece los depósitos de calcio

Fase Calcificante: En esta fase se observan depósitos de calcio en el tendón. Tras un tiempo silente, aparece la fase de reabsorción, con la que nuestro sistema intenta eliminar esos depósitos de calcio fagocitándolos, lo que conlleva la aparición de edema y un aumento de la presión intratendinosa. Generando mucha limitación y dolor.