Tengo una hernia Lumbar. ¿Cuál es su tratamiento?

El dolor lumbar, se define por la localización del dolor típicamente entre los márgenes de las últimas costillas y la zona alta de los glúteos. Generalmente se acompaña de dolor en una o ambas piernas, y algunas personas presentan de forma asociada síntomas neurológicos en los miembros inferiores.

El dolor lumbar tiene una alta prevalencia afectando hasta a 2/3 de la población a lo largo de su vida. De acuerdo con el Institute for Clinical Systems Improvement, la duración de los síntomas entre 0-6 semanas se considera agudo, entre 6-12 semanas se considera subagudo y a partir de las 12 semanas crónico.

El dolor lumbar es un síntoma, no una patología, y su origen puede ser debido a numerosas anormalidades que pueden ser conocidas o desconocidas. Para la mayoría de pacientes que presentan dolor lumbar no es posible identificar de forma específica el origen nociceptivo del dolor, por lo que se considera Dolor Lumbar inespecífico.  Mediante la valoración inicial que comprende, tanto la historia clínica como la exploración física deberíamos de intentar encuadrar a los pacientes de dolor lumbar en uno de estos 3 subgrupos.

  • Dolor lumbar inespecífico
  • Dolor lumbar con radiculopatía o estenosis de canal
  • Dolor lumbar de origen no espinal
  • Dolor lumbar asociado a otras causas espinales.

La mayoría de pacientes con dolor lumbar tienen un buen pronóstico.

La mayoría de pacientes con dolor lumbar, ya sea con o sin radiculopatía, tienen una mejoría sustancial durante las primeras 4 semanas. Generalmente, los casos que cursan con radiculopatía son procesos autolimitantes y se solucionan con el paso de las semanas o meses.

La mayoría de los casos de herniación del disco se reabsorben aproximadamente a las 8 semanas del inicio de los síntomas. Se han realizado números estudios desde los años 90 que nos indican que la mayoría (75%) de los pacientes que sufren una hernia de disco lumbar, al año, ha sido reabsorbida completa o parcialmente.

Sin embargo, aunque la mayoría de los episodios de dolor lumbar agudo se resuelven favorablemente, un parte sustancial de los pacientes desarrolla dolor lumbar crónico o recurrente.

¿Como debería tratarse el dolor lumbar?

El tratamiento debería de empezar con un abordaje no farmacológico que comprende técnicas de auto-manejo para el dolor, ejercicio físico y Fisioterapia. En caso de que esto no sea suficiente, se podrá hacer uso de los fármacos con el objetivo de reducir el dolor.

Es importante entender, que desde la Fisioterapia, el dolor lumbar se puede tratar en cada una de sus fases y que el tratamiento se ajustará en función de los niveles de dolor. En fases agudas, nuestro objetivo será reducir los niveles de dolor y mejorar la función (generalmente relacionada con gestos como agacharse, calzarse, ect) mientras que según avance el tiempo el objetivo será realizar ejercicio terapéutico para reducir el riesgo de recaída en este problema tan común.